miércoles, 1 de mayo de 2013

Oasis

Tierra tan solo. Tierra.
¿Dónde se fue mi anhelo...?
Hacedme un favor:
borradme los pies del suelo.

Absorto en este ruido sin fondo,
no veo peligrar mi suelo.
Quiero encontrar la cortina
que incline mis ojos al cielo.

Intruso de la naturaleza,
cualquier señal aquí
(los adverbios no tienen terrenos)
puede ser presagio de duelo.

Me dispongo a caminar,
no tengo más remedio.
Mas resulta triste pensar
que incluso sabe llorar el desierto.